Johann Gottlieb Fichte
Johann Gottlieb Fichte | ||
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Johann Gottlieb Fichte. Litografía por Gareis y Dähling. | ||
Información personal | ||
Nacimiento | 19 de mayo de 1762 Rammenau, Electorado de Sajonia | |
Fallecimiento | 27 de enero de 1814 Berlín, Reino de Prusia | |
Causa de la muerte | Tifus | |
Lugar de sepultura | Dorotheenstadt cemetery, Alemania | |
Nacionalidad | Alemana | |
Religión | Luteranismo | |
Familia | ||
Hijos | Immanuel Hermann Fichte | |
Educación | ||
Educado en |
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Supervisor doctoral | Immanuel Kant | |
Alumno de |
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Información profesional | ||
Ocupación | Filósofo y profesor universitario | |
Área | Filosofía | |
Conocido por | Precursor del idealismo alemán y el nacionalismo alemán | |
Empleador |
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Estudiantes | Friedrich Schelling | |
Movimiento | Idealismo alemán | |
Obras notables |
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Miembro de |
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Johann Gottlieb Fichte (Rammenau, 19 de mayo de 1762-Berlín, 27 de enero de 1814) fue un filósofo alemán de gran importancia en la historia del pensamiento occidental. Como continuador de la filosofía crítica de Kant y precursor tanto de Schelling como de la filosofía del espíritu de Hegel, es considerado uno de los padres del llamado idealismo alemán.
Índice
1 Vida
2 Pensamiento
2.1 El «socialismo ético»
3 Obra
4 Referencias
5 Bibliografía
6 Enlaces externos
Vida
Nacido de padres muy pobres, durante su infancia tuvo que trabajar cuidando ocas para ayudar a su familia. Gracias al apoyo del barón Von Miltitz pudo Fichte comenzar sus estudios. El barón, después de verle imitar al pastor y escucharle repetir de memoria un sermón al cual no había podido asistir, se decidió a ayudarle.
Tras acabar sus estudios en el instituto de segunda enseñanza Schulpforta de Naumburgo, se inscribe en la facultad de Teología de Jena en 1780, para después trasladarse a Leipzig. Durante estos años la ayuda del barón disminuyó paulatinamente, por lo que para aliviar la falta de medios Fichte se puso a trabajar de preceptor, abandonando sus estudios de Teología. Se mudó a Zúrich donde conoció a Johanna Rahn, con la que finalmente se casaría a escondidas en octubre de 1793. En Zúrich Fichte también se afilió en la logia masónica "Modestia cum Libertate" donde solía frecuentar Johann Wolfgang von Goethe.[1][2]
En 1791 viajó a Königsberg para conocer a Kant. Aunque inicialmente éste no pareció muy agradado por esta inesperada visita, cuando Fichte le enseñó un escrito suyo, el Intento de crítica de toda revelación, le agradó tanto a Kant que pidió personalmente a su editor que lo publicara, lo cual se hizo anónimamente en 1792. Como los académicos pensaron que el libro había sido escrito por el propio Kant, cuando el mismo Kant aclaró la confusión y alabó públicamente la obra, la reputación de Fichte creció significativamente entre la comunidad de filósofos. A consecuencia de este ascenso de su fama, fue llamado a la Universidad de Jena para ocupar una cátedra de filosofía que había quedado vacante. Allí, entre 1794 y 1795 dictó una serie de polémicas lecciones que serían publicadas como Algunas lecciones sobre el destino del sabio, en las cuales se exponen los temas fundamentales de su reflexión filosófica.
En 1799 una áspera polémica sobre el ateísmo, sostenida con un discípulo, le obligó a dimitir, trasladándose en 1800 a Berlín, donde, como no había universidad, tuvo que trabajar dando lecciones privadas para mantenerse.
En 1806, en el Berlín ocupado por Napoleón, Fichte escribió los Discursos a la nación alemana, que se convirtió en el origen del nacionalismo alemán.
Cuando en 1810 se creó la Universidad de Berlín, fue nombrado profesor ordinario de filosofía, siendo posteriormente elegido rector en 1811. Al desatarse la Guerra de Liberación en 1813, Fichte deja sus lecciones y se enrola en la milicia.
Murió en enero de 1814 a los 51 años de edad a causa del tifus que le había contagiado su mujer, la cual había contraído a su vez la enfermedad mientras trabajaba de enfermera voluntaria cuidando a soldados en un hospital militar.
Su hijo Immanuel Hermann Fichte también se dedicó a la filosofía.
Pensamiento
Fichte no aceptaba el argumento kantiano sobre la existencia de los noumena o «cosas en sí», realidades supra-sensibles más allá de las categorías de la razón humana. Veía la rigurosa y sistemática separación entre las «cosas en sí» y las cosas «tal y como se nos representan» (phenomena) como una invitación al escepticismo.
En vez de aceptar dicho escepticismo, Fichte sugirió radicalmente que se debía abandonar la noción de mundo noumenal (y la "cosa en sí") y en su lugar aceptar el hecho de que la consciencia no tiene su fundamento en el llamado «mundo real» representado imaginariamente como "afuera" de la consciencia cognitiva. De hecho, Fichte es famoso por su original argumentación de que la consciencia no necesita más fundamento que ella misma: de esta forma, el conocimiento no parte ya del fenómeno, sino del Sujeto en cuanto dota de sentido al mismo proceso cognitivo. Es así que se crea el Idealismo: la realidad epistemológicamente hablando, es un producto del sujeto pensante, en contraposición al realismo ingenuo y al empirismo, el cual afirma que los objetos a conocer existen independientemente del sujeto que los percibe.
Esta noción finalmente se convirtió en la característica definitoria del Idealismo Alemán y, por lo tanto, en la clave esencial para la comprensión de la filosofía de Hegel. Fichte aunque en alguna medida rompe con el criticismo de Kant, es al mismo tiempo el enlace entre Kant, -su maestro-, y el giro hacia el Sujeto que caracterizará a todo el Idealismo Alemán. En este sentido y a pesar de las opiniones escritas de Kant mismo, Fichte se ve a sí mismo como continuador consecuente de la obra de Kant. Según Fichte (Fundamento de toda Doctrina de la Ciencia) se trata en última instancia de proseguir las consecuencias epistemológicas y ontológicas contenidas en la postulación del Sujeto kantiano. Las categorías en Kant no tienen génesis, son dadas, mientras en Fichte las categorías sí tienen génesis, pues son autopoyéticas, se construyen en la interacción universal y necesaria entre el "Yo" y el No-Yo", y su síntesis.
En su famoso trabajo Fundamento del derecho natural, Fichte establece que la auto-consciencia es un fenómeno social. Es decir, él afirma que aunque su existencia depende de los objetos del mundo externo, sin embargo, la mera percepción de estos objetos externos depende de la auto-consciencia. La solución de esta paradoja, para Fichte, es que un ser racional adquiere su consciencia plenamente cuando es «evocado» como consciente por otro ser racional fuera de él mismo.
A causa de esta necesidad de relación con otros seres racionales para la consecución de la consciencia, Fichte afirma que debe haber una «relación de derecho» en la cual haya un mutuo reconocimiento de racionalidad por ambas partes. Fichte siempre estuvo vinculado a los valores de la Revolución Francesa y a la defensa de su Patria dividida frente a la Invasión de Napoleón y a la Poliarquía pre-moderna que la gobernaba en desunión y sin Constitución. En economía desconfiaba del Librecambismo, y sus consecuencias y abogó por llamado "Estado comercial cerrado" que implica una economía regulada y solidaria, con elementos de proteccionismo frente a la irracionalidad del mercado. Al final de su vida , y con la Restauración y la Contrarreforma andante en Alemania, se le acusó de Ateísmo y se le expulsó de la Universidad. De origen humilde, logró estudiar con grandes sacrificios, fue admirador de Kant, pero sus aportes tienen una originalidad propia. Fue además iniciado en la Francmasonería en Suiza.
El «socialismo ético»
En Contribuciones destinadas a rectificar el juicio del público sobre la Revolución Francesa, obra publicada en 1793, poco después de haberse producido la caída de la Monarquía en Francia, Fichte reflexiona sobre la nueva concepción de la propiedad que había traído la Revolución —ahora fruto del legítimo trabajo y no del privilegio, esfera de actividad y no apropiación de cosas— y afirma que «cada hombre que trabaja tiene el derecho de poseer» «una alimentación soportable por el cuerpo humano y en cantidad suficiente para recobrar las fuerzas, una vestimenta adecuada, y una morada sólida y sana». «Éste es el punto de partida del socialismo fichteano», según Jacques Droz, cuyos axiomas enuncia en Fundamentos del derecho natural según los principios de la «Doctrina de la ciencia» (1796) y que lleva a la práctica en El Estado comercial cerrado (1800). Según Fichte, el Estado es el que tiene que garantizar que cada persona reciba un mínimo de bienes que le permita vivir «de su propio trabajo» «tan libre y cómodamente como la naturaleza lo permita». [3]
El hombre debe trabajar, no como una bestia de carga que se adormece bajo su peso y que, después de reponer insuficientemente su agotada fuerza, es despertado de nuevo para llevar el mismo peso. Debe trabajar sin el aguijón del miedo, con gusto y con alegría, conservando tiempo libre para levantar su espíritu y su mirada hacia el cielo, para cuya contemplación está hecho.
Para alcanzar este objetivo el Estado racional (Vernunftstaat) debe reglamentar toda la actividad económica en el marco de un «Estado comercial cerrado» (autarquía), que mantenga las menores relaciones comerciales posibles con el exterior, pero para que el sistema funcione los ciudadanos deben ser conscientes de sus deberes y de su compromiso con la colectividad, de ahí la importancia que concede a la «educación nacional».[4] El objetivo del sistema, como ha señalado Jacques Droz, no es «una igualación artificiosa de las condiciones; no tiene en perspectiva un reparto mecánico de los bienes, deja al trabajo individual el cuidado de acrecentar la propiedad que ha sido originariamente concedida. El socialismo de Fichte es, por tanto un socialismo ético, y su finalidad última es la realización del destino superior de los individuos».[5]
Los principales resultados de la teoría expuesta son éstos: que en un Estado gobernado según el derecho, las tres clases principales de la nación están calculadas entre sí, y cada una limitada a cierto número de individuos; que a cada ciudadano se le asegura su parte proporcional de todo producto y fabricación del país a cambio del trabajo que se le ha asignado, sin otro equivalente, como se practica en los empleados públicos; que con este fin se fija y mantiene el valor de las cosas en sí, y su precio respecto al dinero; por último, para que esto sea realizable, se debe hacer imposible todo comercio de los ciudadanos con los forasteros.
El Estado comercial cerrado (1800)[6]
Obra
Ensayo de una crítica de toda revelación (1792)
Reivindicación de la libertad de pensamiento y otros escritos políticos (1793)
Fundamento de la doctrina de la ciencia (1794)
Algunas lecciones sobre el destino del sabio (1794)
Fundamento del derecho natural (1796)
Sistema de la doctrina moral (1798)
El Estado comercial cerrado (1800)
Disertaciones sobre la época contemporánea (1804)
Las características de la edad actual (1806)
El camino hacia una vida bendita (1806)
Discursos a la nación alemana (1807)
Referencias
↑ Imhof, Gottlieb (1959). Kleine Werklehre der Freimaurerei. I. Das Buch des Lehrlings. 5. Auflage. Lausanne: Alpina, p. 42.
↑ Lawatsch, Hans-Helmut (1991): Fichte und die hermetische Demokratie der Freimaurer. En: Hammacher, Klaus, Schottky, Richard, Schrader, Wolfgang H. und Daniel Breazeale (Hrsg.): Sozialphilosophie. Fichte-Studien Band 3. Amsterdam-Atlanta: Editions Rodopi, p. 204, ISBN 90-5183-236-2
↑ Droz, 1984, p. 559-562.
↑ Bravo, 1976, p. 275-276. "Concebía un Estado orgánico, fuertemente centralizado, capaz de influir sobre sus súbditos gracias sobre todo al arma de la 'educación nacional', en el que la propiedad tenía que estar enormemente limitada por la intervención pública y debía desparecer la gran propiedad de las tierras, y en el que, por último, cada uno tuviera asegurado el derecho a la existencia material y a todos los ciudadanos se les impusieran obligaciones restrictivas de la libertad económica (en especial de la comercial), para crear en el interior del propio Estado una especie de comunidad armónica, casi enteramente cerrada respecto al exterior"
↑ Droz, 1984, p. 562-564. "Su sistema sustituirá este orden general en el que la fortuna de unos es la miseria de los demás por una ley nueva, de acuerdo con la cual el Estado se reserva la tarea de aumentar la justicia; pero la violencia estatal carecerá de sentido si no se permite a su vez que el ciudadano tenga dignidad espiritual y ejerza funciones que hagan verdaderamente de él un hombre. De ahí la importancia que da Fichte al concepto de ocio. En todo el conjunto de su obra, aparece como preocupación central, en medio de las violencias que impone un orden nuevo, el respetar y promover la libertad humana"
↑ Bravo, 1976, p. 276.
Bibliografía
Bravo, Gian Mario (1976) [1971]. Historia del socialismo 1789-1848. El pensamiento socialista antes de Marx [Storia del socialismo, 1789-1848. Il pensiero socialista prima di Marx]. Barcelona: Ariel. ISBN 84-344-6508-6.
Droz, Jacques (1984) [1976]. «El socialismo alemán del Vormärz». En Jacques Droz (dir.). Historia general del socialismo. De los orígenes a 1875. Barcelona: Destino. pp. 553 y ss. ISBN 84-233-1305-0.
Fichte, Johann Gottlieb (2013). Faustino Oncina Coves, ed. Obra completa. Biblioteca de Grandes Pensadores. Madrid: Editorial Gredos. ISBN 978-84-249-3674-7.
Enlaces externos
Wikimedia Commons alberga una categoría multimedia sobre Johann Gottlieb Fichte.- Sociedad Internacional Fichte
- Obras de Johann Gottlieb Fichte, en alemán
- Dossier Fichte; incluye vocabulario y un estudio sobre la Reivindicación de la libertad de pensar
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